Centro Medico "San Miguel" Caracas


El centro médico social “S. Miguel Arcángel” nace como parte de un conglomerado de edificaciones, producto de la construcción de la parroquia “S. Miguel”. Junto a ella, se contemplaba este centro médico, la casa de la comunidad, una escuela y un piso destinado a los superiores mayores de la Congregación de los Sacerdotes del “Sagrado Corazón de Jesús”. El tiempo y el dinero llevaron a menos dicha ambición.
Ya desde el año 1963 se tienen los antecedentes del actual centro médico. En la historia de la provincia española de los Sacerdotes del Sagrado Corazón de Jesús, páginas 253 y 253 leemos lo siguiente:
“…el 16 de Marzo de 1963, el P. Francisco Sanz y la comunidad, tuvieron la satisfacción de bendecir un consultorio parroquial médico – dental. Aunque inicialmente estuvo muy pobremente dotado de medios técnicos y económicos, muy a tono con la pobreza de la inmensa mayoría de los feligreses, desarrolló sin embargo, desde el principio, una importante y apreciadísima labor entre los más marginados. Las medicinas provenían de aportaciones gratuitas y hasta el aparato de medir la tensión no era propio sino prestado. La consulta médica era semi-gratuita –exceptuados los casos de indigentes que la recibían totalmente gratuita – para evitar abusos ya comprobados. Desde el primer momento con altruismo admirablemente desinteresado los doctores Oscar Ruiz, Celia Castillo y Teresa Correa y el odontólogo Luis Honorio González. El hermano Juan José Soldevila hacía de enfermero y factotum, con gran aprecio y edificación de aquellas gentes sencillas tan necesitadas de ayuda y calor cristiano y humano.”
Como se deduce, no solamente era odontología lo que se ofrecía sino medicina general y atención gratuita para la farmacia, práctica que se mantuvo en nuestros centros médicos hasta los años ’90, cuando las restricciones del Gobierno hicieron imposible la adquisición gratuita de medicinas por entes internacionales y nacionales.

El año 1971 marca el fin de una larga espera en cuanto a la construcción de la iglesia parroquial y la casa parroquial pero también se prosiguen los trabajos de la construcción del gran edificio que albergaría de forma definitiva las dependencias del centro médico social, la escuela y las oficinas de los superiores. Hemos de decir que la escuela poco a poco se fue desechando debido a las grandes dificultades de personal y los innumerables permisos que se debían gestionar para abrirlo. Es en la década siguiente, a finales, cuando llegado el final de tantas penurias económicas, cuando se van definiendo los lugares para el centro médico. Se piensa en los dos primeros pisos para evitar un inconveniente desplazamiento a los minusválidos. El resto de los dos pisos serían destinados a locales, oficinas y otros para la parroquia.
Hacia el año 1987 – 1988 empieza a funcionar de forma incipiente el centro médico con consultas en odontología, medicina general y posteriormente se abren consultas de otorrinolaringología, consultas jurídicas, farmacia, laboratorio, etc. Entre el hermano José María Urbina y el párroco Antonio González, se lleva la empresa de atención social a los más necesitados.
En los años 1990 prosigue la atención médica. Hemos de decir que el centro médico se encuentra ubicado al lado del Seguro Social del Sur, es decir, el Seguro Social del Cementerio, como comúnmente se le llama. Esto marca una gran “competencia” en cuanto servicio, ya que la atención sanitaria desde el gobierno debía ser excelente y gratuita. En el caso del centro médico “S. Miguel” se hacía el esfuerzo de la excelencia y se ofrecían consultas y exámenes de laboratorio a precios de hasta el 25% del costo normal en cualquier clínica o centro médico privado.
Para la primera década de este siglo, el centro médico en medio de dificultades, sigue ofreciendo servicios de pediatría, medicina general, laboratorio, rehabilitación y fisioterapia, obstetricia, ecografía, oftalmología, etc siempre bajo la óptica de atención a los más necesitados y sobre todo, sin fines de lucros, a bajo costo para realmente hacer justicia social a tantos que carecen de medios y le son negados los servicios básicos de salud que son inherentes de cualquier derecho humano.
Si estás interesado/a en ayudar o ser intermediario entre cualquier ente que puedan donar medicinas o dinero, el centro médico “S. Miguel” te estará agradecido por esa ayuda que le brindas. Puedes acercarte a sus instalaciones en la calle Luis Braille, entre Totumos y Cármenes en el Cementerio, Caracas.